Estas cosas no deben considerarse tanto obras de arte como la superestructura alucinada y compulsiva que da a luz a la canción o al libro o al guion o a la partitura. Son un sistema de apoyo de información tangencial y maníaca. Espero que les encuentres algún valor. Para mí, estas piezas tienen una energía creativa distinta de la de la obra terminada: cruda y directa, pero no menos convincente.