Introducción de Luc Fraisse Prólogo y traducción de Alan Pauls
«Ojalá pudiera escribir así.» Virginia WoolfEstos relatos excepcionales de un joven Marcel Proust han permanecidoinéditosdurante más de un siglo. Probablemente fueron víctimas de su propiacensura, ya que la mayoría ponen en escena eldeseo homosexual-un tema que ronda su obra maestra, En busca del tiempo perdido- con excesiva osadía. Compilados en la década de 1950 porBernard de Fallois, el mítico editor deMarcel Pagnol y Joël Dicker, y autor del ensayo Proust antes de Proust, que dedicó gran parte de su vida al estudio de la obra del escritor, estos cuentos suscitan múltiples lecturas. Como afirma Alan Pauls en su prólogo: «Es esa hipersensibilidad hacia lo maleable y la voluntad de seguirle la pista, siempre, no importa adónde nos lleve, la razón por la que estos relatos [...] nos interpelan: leemos a Proust porque es nuestro contemporáneo».«Proust sale del armario con ocho cuentos inéditos. [...] Son textos [...] con el inconfundible aroma decadente y sensual del crepúsculo del siglo XIX. En la manera de captar los movimientos del alma humana o en los esbozos de escenas y personajes se adivina el genio en estado de incubación.»Marc Bassets,Babelia«Cien años después de su Premio Goncourt, el autor de En busca del tiempo perdido vuelve más fuerte que nunca. Proust es la verdadera estrella de la rentrée literaria.»Michel Schneider,Le Point