Suele ocurrir que buscamos la felicidad propia y acabamos obteniendo aflicción. La perspectiva budista expuesta aquí por el Dalai Lama considera que esto sucede porque vivimos apegados a nosotros mismos. Es una actitud mental que olvida nuestra naturaleza interdependiente y nos conduce a actuar con egoísmo causándonos sufrimientos. Cultivar la introspección, la meditación y la disciplina ética nos permitiría comprender nuestra responsabilidad hacia todos los seres y cooperar con ellos.