Desde antes de la década de los años setenta gran parte del mundo ha estado enfrentando una gran tormenta económica y una crisis moral y cultural. Frente a la intensidad de esos vientos, muchos cristianos han sucumbido a la parálisis espiritual del desmayo y la resignación. Charles Colson ha sido un hombre de fe, un reconocido estadista y un formidable defensor de los principion bíblicos.