El dictamen fiscal permite a la autoridad revisar a un mayor número de contribuyentes que los que podría fiscalizar; no obstante, la estructura del sistema obliga al contribuyente a cubrir la mayor parte del costo de dicha revisión, y esto es inconstitucional. Si bien es cierto que el contribuyente está obligado a colaborar en el gasto público, esta obligación no incluye erogaciones adicionales para demostrar que los montos declarados son los correctos. Además de hacer la relatoría de las normas que regulan el dictamen fiscal, el autor analiza las normas secundarias que lo regulan y destaca el papel de los profesionistas en la elaboración de las normas. El autor presenta una propuesta para que el contribuyente no vea afectado su patrimonio en forma desproporcionada por absorber la mayor parte del costo del dictamen fiscal, mientras que el fisco sólo se encarga de la menor parte. Dentro de la propuesta se considera que el licenciado en Derecho coadyuve en la parte jurídica fiscal del dictamen de estados financieros que elabora el contador público. En el actual Derecho mexicano hay carencia de una verdadera teoría tributaria constitucional. Esta obra contribuye al desarrollo de dicha teoría al analizar la esencia jurídica y técnica del dictamen fiscal y los principios tributarios constitucionales.