El metro transporta a millones de usuarios cuyas rutas vitales se entretejen en kilómetros de túneles y rieles. A lo largo de sus recorridos ocurren sucesos insospechados, amores, odios, reflexiones, lecturas, apretujones, aromas, encuentros, robos, cantos, citas debajo del reloj del andén, protestas sociales, ventas clandestinas, así como una serie de situaciones peculiares de los pasajeros.