Cuando crecemos nuestros padres nos muestran una manera de percibir a Dios, y pasamos toda nuestra vida creyendo en una religión sin comprenderla y aún así compartimos esa misma imagen a nuestros hijos o alumnos, pero, quizá, esa imagen que nos forjaron de acuerdo a las costumbres familiares, no corresponde a la imagen que el niño (a) tiene de Dios. ¿En verdad, la manera en que nos comportamos, hablamos, rezamos etc. corresponde a Dios? debemos pensar que la forma en que compartimos a nuestros hijos o alumnos nuestra semejanza con Dios no corresponde al Dios padre amoroso que nos mostró Jesús. Es importante resaltar que la etapa de pre-escolar es el cimiento para una vida feliz y plena; de la infancia del menor dependerá su desarrollo futuro y sobre todo su fe. En esta colección "Semillas de fe", el autor muestra a Dios como una parte fundamental de la familia, de la sociedad y sobre todo de su propio interior. "Semillas de fe" como bien lo dice su nombre, alimentará al menor de una fe orientada a los valores a través de la visión propia del niño (a).
