GRACIELA ALEJANDRINA MURILLO PANIAGUA
El lenguaje es el instrumento que usamos para desarrollar relaciones personales, realizar transacciones sociales entre personas y participar en actividades sociales. Estos usos o prácticas del lenguaje se realizan según el contexto, es decir, el momento y el lugar en el que ocurren los intercambios, los textos que entran en juego y los propósitos comunicativos que los originan. A lo largo de la historia de cada cultura se han ido estableciendo estas prácticas sociales del lenguaje. Las prácticas sociales del lenguaje son esos modos de interacción que guían la producción e interpretación de los textos orales y escritos; comprenden las diferentes formas de leer, interpretar, estudiar y compartir los textos, de ir aprendiendo a escribirlos y de participar en los intercambios orales y analizarlos. Las prácticas sociales se han clasificado en tres ámbitos: estudio, literatura y participación ciudadana.